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Estructura de gobierno

La forma elegida por el gobierno italiano es la República Parlamentaria. Se trata de un tipo de gobierno en el que la soberanía pertenece al pueblo que, gracias a este poder, puede elegir a los órganos del Estado, en particular al Parlamento.

El Presidente de la República es el más alto cargo del Estado y representa su unidad.

La ley fundamental de la República es la Constitución, es decir, el código que establece los principios, derechos y deberes fundamentales de los ciudadanos y establece su ordenamiento.

El sistema político se divide en tres órganos distintos: El Parlamento, el Gobierno y el Poder Judicial.

Parlamento

El Parlamento está compuesto por la Cámara y el Senado.

El Parlamento italiano tiene una estructura bicameral, formada por el Senado de la República y la Cámara de Diputados, y está compuesto por 400 diputados y 200 senadores elegidos por sufragio universal por los ciudadanos mayores de edad.

Junto con el Gobierno, elige los fines y objetivos públicos que deben alcanzarse en interés de la comunidad.

Gobierno

Tiene la tarea de aplicar las leyes a través de la administración pública (complejo de órganos y oficinas), para realizar concretamente los fines públicos.

En determinados casos, puede aprobar actos con fuerza de ley.

Magistratura

Interpreta y aplica la ley al caso concreto, constatando las infracciones de la ley y aplicando las sanciones pertinentes.

Presidente de la República

Es el Jefe del Estado que representa la unidad nacional y es el garante de la Constitución.

Tribunal Constitucional

Juzga si las leyes y los actos con fuerza de ley son conformes a la Constitución. Resuelve los conflictos entre los órganos del Estado.

Funciones y procesos

Los partidos son muy importantes, representan la forma en que los ciudadanos pueden relacionarse con el gobierno y salvaguardan la democracia. Cada ciudadano puede elegir ser miembro de un partido o simplemente votar por él. Cada partido es responsable ante el pueblo y sus votantes. Por tanto, los ciudadanos pueden ejercer el poder que poseen de dos formas: votando o fundando democráticamente un partido que refleje sus ideales y contribuya a determinar la política de la nación.

El sistema político italiano está organizado según el principio de la separación de poderes: el poder legislativo corresponde al Parlamento, el gobierno tiene el poder ejecutivo, mientras que el poder judicial, independiente del ejecutivo y del legislativo, ejerce el poder judicial.

Todas las leyes deben ser promulgadas en última instancia por el Presidente de la República, quien, mediante un mensaje motivado a las cámaras, puede solicitar una nueva deliberación (el llamado veto suspensivo). Sin embargo, si las Cámaras aprueban de nuevo la ley, deberá promulgarse.

El Consejo de Ministros se rige por una mayoría parlamentaria, formada normalmente a partir de una elección entre todos los que tienen derecho a voto.

El Presidente de la República es elegido por el Parlamento y es el garante de la Constitución. También representa la unidad de la nación. La tarea del Presidente consiste en nombrar al Primer Ministro, es decir, al jefe del gobierno, quien a su vez nombra a los ministros que formarán el nuevo gobierno y se harán cargo de los distintos ministerios.